Diastema: ¿Por qué no es bueno tener los dientes separados?
En odontología, nos referimos al diastema cuando hablamos del pequeño espacio existente entre dos dientes. Cuando este minúsculo hueco crece, la salud de nuestra boca corre un riesgo.
El diastema no es solo un problema que afecte a los incisivos superiores, aunque son los dientes donde esta patología es más evidente. En los últimos años, se ha puesto ‘de moda’ el separar estas piezas como si de un complemento estético se trataran. Esto es un grave error. La razón es que los dientes separados tienden a concentrar mayor número de sedimentos, y pueden ser una fuente importante de bacterias.
Los dientes separados, al igual que cuando existe apiñamiento, tienden a acumular placa bacteriana, que es el paso previo al origen de la caries.
Cuando el diastema es excesivo y existe riesgo de enfermedad bucodental o maloclusión, debemos recurrir a la ortodoncia como método corrector para un perfecto alineamiento que mantenga las funcionalidades y la salud de nuestra boca.